Los profesionales expresaron su apoyo a la Asociación Guatemalteca de Jueces por la Integridad.

El Grupo Iberoamericano de la Unión Internacional de Magistrados rechazó los “ataques continuos” contra Erika Aifán y Pablo Xitumul. Asimismo, mencionó que dichas acciones “no tienen cabida en un ordenamiento jurídico que promueva la independencia y la imparcialidad del Organismo Judicial”. 

“Conforme a los estándares y obligaciones internacionales vinculantes, las autoridades del Estado guatemalteco deben abstenerse de interferir en la rama judicial. Por el contrario, tienen la obligación de garantizar protección física y legal a juezas y jueces”, agregó. 

La organización internacional mencionó que, en Guatemala, están bajo amenaza la independencia del Poder Judicial y el libre ejercicio de la profesión jurídica.

“Jueces y juezas son víctimas de ataques y violaciones de sus derechos, que incluyen amenazas, interferencias externas a la hora de realizar sus actividades profesionales, detenciones arbitrarias y persecuciones”, puntualizó.