La estudiante Dulce Archila acudió de forma voluntaria al Juzgado Duodécimo de Primera Instancia Penal. Ella es señalada de hacer pintas en el Congreso de la República durante una manifestación del 21 de noviembre del 2020. En contra de la artista de 19 años ya se había girado una orden de captura. La familia de la joven calificó esta situación como un “acto político no justo”, que atenta contra la libertad de expresión de la universitaria.