El ritmo de creación de empleo en Estados Unidos cayó fuertemente en agosto, un nuevo golpe para el presidente Joe Biden, debilitado por la crisis afgana, pero también un nuevo argumento en favor de sus planes de inversión.
El mes pasado solo se crearon 235 mil puestos de trabajo, tres veces menos de los 750 mil que esperaban los economistas.
Esta fuerte desaceleración se produce sin embargo después de dos meses de crecimiento del empleo, ya que en julio se crearon 1,1 millones de puestos de trabajo y en junio 962 mil, según datos revisados al alza publicados también el viernes.