Luis Fernando Cordón Orellana, diputado por Zacapa, integra por tercer año consecutivo la Comisión de Energía y Minas del Congreso, pese a tener un claro conflicto de interés: su hijo tiene una empresa de transportes que presta sus servicios a CGN-Pronico y para la cual trabaja el legislador como gerente de Operaciones desde 2012, según su perfil en Facebook. Dos funciones éticamente opuestas: como diputado debe legislar y fiscalizar a las compañías mineras pero también es empleado de un contratista de una minera.

El año pasado durante el Estado de Sitio declarado por el Gobierno para proteger los intereses de la mina rusa, los policías resguardaron el paso de camiones contratados para el transporte del mineral, entre los proveedores de este servicio se encuentra la empresa propiedad de la familia del diputado Luis Fernando Cordón Orellana.

Un consorcio periodístico integrado por 20 medios de comunicación y más de 65 periodistas investigaron una filtración de más de 8 millones de documentos relacionados a la empresa ruso-suiza Solway Investment Group, dueña de la Compañía Guatemalteca de Níquel, S. A. (CGN-Pronico), que reveló cómo la minera corrompió todos los poderes del Estado por medio de sobornos y manipulación con la finalidad de mantener sus operaciones en el país.

Adicional a los reportajes de investigación que los diferentes medios de comunicación han publicado en la última semana en base a los millones de documentos extraídos por un grupo de hackers y filtrados al consorcio internacional Forbidden Stories, elPeriódico logró documentar cómo el diputado por Zacapa, Luis Fernando Cordón Orellana, se integró a la Comisión de Energía y Minas del Congreso, pese a que tiene un conflicto de interés con la mina debido a que su hijo Julio Guillermo Cordón Paz, propietario de una empresa de transportes que le brinda servicios al “proyecto minero Fénix”, a cargo de CGN-Pronico.

El 23 de octubre pasado cientos de policías en El Estor, Izabal, corrían al lado de los camiones que prestan servicios de transporte de minerales a CGN-Pronico, entre ellos, los de la empresa Transportes Cordón Paz, S. A., del hijo del diputado Cordón Orellana.
Pero más que un simple proveedor de servicios de transporte de la minera CGN, el hijo del congresista Cordón Orellana es el más leal defensor de la empresa minera y el proyecto Fénix como lo revela su participación en una denuncia presentada por la gremial de pescadores artesanales de El Estor, Izabal, presentada ante la Corte Suprema de Justicia, donde participó como tercer interesado representando a un grupo de empresas proveedoras de la compañía minera a la cual defendió y dio su respaldo durante la vista pública realizada.

El amparo de la Corte Suprema de Justicia, de fecha 9 de enero de 2019, le ordena al Ministerio de Energía y Minas la realización de una Consulta Comunitaria como lo establece el convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) para poder mantener vigente la licencia minera del proyecto Fénix, documenta cómo el hijo del legislador se constituyó como tercer interesado en el proceso iniciado por los pescadores.

En el literal “D”, del documento se menciona a “Julio Guillermo Cordón Paz”, administrador único y representante legal de la entidad Cordón Paz, Sociedad Anónima, como tercer interesado, junto a los otros proveedores de la empresa minera a quienes representa.

Según el amparo, Cordón Paz junto con los otros empresarios expresaron que la suspensión de la operación del proyecto minero Fénix, vulneraría su derecho como proveedores beneficiados por la minera CGN-Pronico, específicamente señalaron la libertad de industria, comercio y trabajo como derechos vulnerados, por lo que solicitaron que el amparo fuera denegado a los pescadores.
El hijo del legislador, según explicaron a elPeriódico personas familiarizadas con el tema, provee a la empresa minera de servicios de transporte de minerales, de hecho, el diputado tiene registrada a su nombre una empresa individual denominada Transportes Mineros, pero se desconoce si de forma directa presta los servicios o lo hace solo por medio de su hijo.

En los documentos obtenidos por el consorcio de medios, se encontró una factura que la empresa minera CGN pagó a la empresa de los Cordón, vinculada con el movimiento de mena de níquel de la compañía Mayaniquel, propiedad del grupo de rusos que habría entregado una alfombra llena de dinero al presidente Alejandro Giammattei a cambio de obtener la entrega de una parte del puerto en Izabal y que obtuvo una concesión minera que no había logrado obtener desde 2010.

La factura según señaló el consorcio de medios, era un comprobante de 2020, que muestra la relación comercial entre Mayaniquel y Solway/CGN/Pronico. “El 18 de febrero de aquel año, CGN pagó a Transportes Cordón Paz Q383 mil 155 (unos US$51 mil) por el transporte de 17 mil 913 toneladas de mena de níquel, el material en bruto del que se saca el níquel, extraído de la mina de Mayaniquel”, señala una publicación del consorcio de medios dada a conocer la semana pasada.