Ucrania negocia ahora con EE. UU. el suministro de misiles de largo alcance para poder golpear la retaguardia enemiga y frustrar la esperada ofensiva general de Rusia, que acusa a la OTAN de buscar su derrota estratégica con el nuevo armamento para Kiev.
“Cada fase de la guerra requiere cierto tipo de armas. Ya existe una coalición de tanques. Ya hay conversaciones sobre misiles de largo alcance y suministro de aviones de combate”, aseguró Mikhaylo Podolyak, asesor presidencial ucraniano, en Twitter.
Después del compromiso occidental de enviar más de un centenar de tanques y carros de combate, Kiev ha pedido ahora misiles de hasta 300 kilómetros de alcance, con los que podría golpear incluso territorio de la anexionada península de Crimea.