Las estructuras dedicadas al trasiego de drogas han mutado y optan por utilizar aún más los océanos para transportar droga, que llega a Guatemala para continuar su camino hacia México y Estados Unidos.

Las estructuras criminales dedicadas al trasiego de drogas desde Sudamérica hasta Estados Unidos han mutado la forma de trasladar los ilícitos, según la información más reciente que hizo pública el Ministerio de Gobernación (Mingob).  

Hace menos de tres años la mayor cantidad de droga era trasladada vía área a Guatemala, pero el modo de operar cambió y los criminales utilizan ahora los océanos Pacífico y Atlántico. 

“Estas organizaciones mutan, cambian el modo de operar. Ahora sabemos que vía marítima y terrestre es donde se puede estar incrementando el trasiego”, reconoció Werner Ovalle, viceministro antinarcótico del Mingob. 

Las pesquisas dan cuenta que la droga está siendo trasladada en “altamar o rutas de comercio exterior”.  

Un investigador antinarcóticos afirmó que las organizaciones criminales transnacionales utilizan las rutas de los barcos que trasladan mercadería lícita para guiar sus embarcaciones con drogas. La ruta inicia en Ecuador y Colombia por el Pacífico o por el Atlántico y los ilícitos salen de Venezuela y siguen la trayectoria comercial hasta Centroamérica y México. 

La fuente enfatizó que son lanchas tipo «tiburonera”, es decir, naves de fibra de vidrio diseñadas para pesca comercial en mar abierto, que les permite viajar a más de 90 millas náuticas de la costa —167 kilómetros — transportando la droga hasta Honduras, El Salvador, Guatemala y México, posteriormente es trasladada vía terrestre hasta Estados Unidos.

Ovalle dijo que junto al Ministerio de la Defensa trabajan para evitar el trasiego de droga.  

El buque que donó Estados Unidos el 4 de octubre al Comando Naval del Pacífico es para el combate al crimen organizado y resguardo de las fronteras marítimas, afirmó el funcionario. 

Agregó que a través del comercio exterior y gestión de riesgo hay un intercambio de información con unidades antinarcóticos de otros países. 

 “Esto es para tener alertas y poder hacer una inspección más asertiva. El crimen organizado es trasnacional y esto obliga a que las acciones de control las realicemos de forma coordinada”, comentó Ovalle.  

Ovalle también informó que firmaron un convenio con autoridades de Colombia, a inicio del 2024, para fortalecer la lucha contra el narcotráfico.  

“Es un país que obviamente es de los productores de droga y esto nos obliga a tener coordinaciones y cambio de información”, señaló.  

En Sudamérica, el Ministerio de Gobernación ha entablado conversaciones con unidades antinarcóticas de Ecuador, Perú y Chile, para obtener información de las actividades de los grupos del crimen organizado.  

El viceministro enfatizó que analizan firmar un convenio con autoridades de El Salvador, Honduras y Costa Rica para fortalecer la lucha contra el narcotráfico desde la perspectiva regional. “También con Panamá estamos viendo esos acercamientos”, argumentó.  

Apoyo de EE. UU. 

Luego de la visita de Alejandro Mayorkas, secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos, en marzo de 2024, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EE. UU. (CBP, en inglés), inició un análisis de las capacidades de las fuerzas de seguridad en fronteras, puertos y aeropuertos de Guatemala, a través del programa Capabilities Gap Analysis Process Plus (CGAP-Plus).  

A partir de ahí el personal de la Oficina de Aduanas realizó evaluaciones en el Aeropuerto Internacional La Aurora, puertos marítimos y puestos fronterizos y se espera los resultados en noviembre próximo.  

En el proyecto participó la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT), el Instituto Guatemalteco de Migración (IMG), Ministerio de la Defensa, Aeronáutica Civil y portuarias del Atlántico y Pacifico.  

“Esto está enfocado en poder atender todos los ilícitos y todos los desafíos que se tienen en la zona fronteriza, partiendo de un análisis de cada una de las instituciones que tienen alguna competencia”, puntualizó Ovalle.  

Luego del análisis se pretende tener un plan específico para mejorar la infraestructura, capacidades, profesionalización del personal y coordinación de entre las instituciones que tienen intervención en áreas fronteriza.  

El funcionario afirmó que a partir de enero de 2025 se pondrá en marcha “varias de las recomendaciones” que detalle el informe de las autoridades estadounidenses. 

“Muchas de las recomendaciones tendrán un apoyo, acompañamiento y recursos financieros por parte del gobierno de Estados Unidos”, enfatizó el viceministro. 

Más recursos  

Estados Unidos  afirmó el 2 de octubre que hay buenos resultados en Guatemala en la lucha contra el narcotráfico y desarticulación de estructuras criminales. La declaración se dio en medio de la reunión del “Diálogo Inaugural de Alto Nivel Sobre Seguridad”, en el que participaron funcionarios de ambos gobiernos. 

Todd Robinson, subsecretario Adjunto de la Oficina de Asuntos Internacionales de Narcóticos y Aplicación de la Ley de Estados Unidos (INL), dijo que tienen un compromiso entre su nación y Guatemala en temas de seguridad y justicia para lograr un cambio. Dicho proyecto inició en marzo de este año, con una inversión de US$50 millones y hoy se aprobaron otros US$50 millones. 

Los US$100 millones permitirán un cambio en las instituciones y aumentarán los esfuerzos para generar resultados que beneficien a los habitantes de ambos países.    

Tobin Bradley, embajador de EE. UU en Guatemala, dijo que el país es uno de los 11 que calificaron en todo el mundo y que es parte del proyecto para una región más segura. 

“Eso no solo se trata de más fondos para apoyar el desarrollo y seguridad en Guatemala, es un enfoque de nuestros expertos, con sus expertos para avanzar en soluciones nuevas y compartidas. Simplemente estamos unidos por la democracia en Guatemala, prosperidad y seguridad”, dijo el diplomático. 

De acuerdo con el Mingob han incautado 10 mil 800 kilos de cocaína, han capturado a 21 personas con orden de extradición a EE. UU. y han desmantelado bandas criminales que se dedicaban a la trata de personas y trasiego de drogas.