El caso de esta deportista transgénero ha dividido a la opinión pública. Algunos argumentan que tiene una ventaja fisiológica injusta y otros que se le debe permitir competir libremente con las mujeres.
Dieciséis 16 integrantes del equipo femenino de natación de la Universidad de Pensilvania han pedido que la nadadora trans Lia Thomas sea excluida de la competición de la Ivy League al considerar que tiene ventajas biológicas.
La nadadora olímpica Nancy Hogshead se hizo eco este viernes en sus redes sociales de la misiva que envió el día anterior en representación de algunas compañeras para exhortar a la liga universitaria a que respalde a las “mujeres biológicas”.
“Apoyamos totalmente la decisión de Lia Thomas de transicionar de hombre a mujer (…). Sin embargo, Lia tiene una ventaja biológica injusta en el deporte”, afirmaron sus compañeras.
En ese sentido, las nadadoras respaldaron la decisión de la federación de natación de Estados Unidos (USA Swimming), que el martes anunció un cambio en sus políticas para limitar el nivel de testosterona en sangre que deben tener las deportistas, lo que podría afectar a Thomas.
La medida sin precedentes de la federación tiene lugar después de que Lia Thomas batiera en noviembre pasado los récords de la Ivy League, liga universitaria del noreste de Estados Unidos, en la categoría femenina de los 200 metros libres.
En su carta, Nancy Hogshead esgrime que su compañera Lia Thomas, quien hizo su transición en 2020, ha pasado de clasificar en el lugar 462 de la categoría masculina al puesto número uno en la categoría femenina.
“Ha sido extremadamente difícil para nosotras ser derrotadas por alguien que compite con ventaja por tener una fuerza, una altura y una capacidad pulmonar propia de los hombres”, expresaron.