Al menos 115 personas murieron en un tiroteo contra una sala de conciertos.
El presidente ruso, Vladímir Putin, condenó el “bárbaro” atentado terrorista del viernes contra una sala de conciertos en las afueras de Moscú, donde murieron al menos 115 personas, y clamó venganza contra los que encargaron dicho ataque, que fue reivindicado por el Estado Islámico.
“Todos los autores, organizadores y los que encargaron este crimen recibirán un merecido e inevitable castigo, sean quienes sean e independientemente de que los hayan enviado”, dijo Putin durante una alocución televisiva.