Russian President Vladimir Putin attends a session on the sidelines of the COP26 UN Climate Summit taking place in Glasgow, via teleconference in Moscow, on November 2, 2021. - World leaders meeting at the COP26 climate summit in Glasgow will issue a multibillion-dollar pledge to end deforestation by 2030 but that date is too distant for campaigners who want action sooner to save the planet's lungs. (Photo by SPUTNIK / AFP)

El presidente Vladimir Putin advirtió ayer que Rusia está preparada para responder con “medidas militares y técnicas” a lo que calificó como acciones poco amistosas de Occidente, a medida que aumentan las tensiones por el conflicto en Ucrania, y pidió negociaciones “serias” con la OTAN sobre seguridad.

“En el caso de que se mantenga esta postura que claramente es muy agresiva por parte de nuestros colegas occidentales, vamos a adoptar las medidas militares y técnicas que sean apropiadas”, dijo durante una reunión en el Ministerio de Defensa, en un momento en que crece el temor de una invasión rusa a Ucrania.

“Tenemos absolutamente el derecho”, subrayó.

“El refuerzo en las fronteras rusas de los agrupamientos militares de Estados Unidos y la OTANasí como la organización de maniobras militares de amplitud, constituyen una fuente seria de preocupación”, prosiguió Putin, en momentos en que Occidente acusa al Kremlin de haber desplegado decenas de miles de soldados en la frontera con Ucrania en preparación de una ofensiva.

El presidente ruso destacó nuevamente la necesidad, a su entender, de que Estados Unidos y la OTAN brinden garantías de seguridad a Rusia firmando tratados que prohíban la ampliación de la Alianza Atlántica.

Posteriormente, en su primera conversación telefónica con el nuevo canciller alemán, Olaf Scholz, en esta misma jornada, Putin pidió negociaciones “serias” con la OTAN sobre las propuestas de garantías de seguridad exigidas por Moscú.

Provocaciones

Por su parte, el ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigu, acusó a Washington de estar preparando “provocaciones” en Ucrania, lo que incluye el envío de “un compuesto químico indeterminado” hacia el frente donde se libra el conflicto entre fuerzas ucranianas y separatistas prorrusos. Según él, 120 miembros de empresas militares privadas también se encuentran en la región para entrenar a “fuerzas especiales ucranianas y grupos radicales en acciones de combate”.