Familiares de víctimas dijeron que pueden pasar hasta seis meses entre cada audiencia y calificaron como “una tortura” el proceso lento en los tribunales.
Miembros de organizaciones y familiares de víctimas de femicidio se concentraron hoy afuera del Palacio de Justicia para denunciar retrasos de los procesos en los tribunales y exigir que los casos sean agilizados.
La actividad se llevó a cabo en el segundo aniversario de la muerte de Chelsiry Paola Hernández Escalante. La madre de Chelsiry, pidió hoy que se haga justicia pronto e indicó que cada audiencia es un tormento y que los retrasos en el caso no permiten que superen la muerte de la menor.
El 4 de febrero de 2020, fue hallado el cuerpo calcinado de Chelsiry, de 12 años, en un camino de terracería en Villa Canales. El proceso contra Edgar Leonel Marroquín Barrera, tío político de la menor y principal sospechoso, no ha concluido.
En la concentración también estuvo presente la madre de Luz María López Morales, quien mencionó que la muerte que tuvo su hija fue “terrible” y pidió a los jueces agilizar el proceso.
“Es una tortura para nosotros, cada seis u ocho meses nos dan fecha para una audiencia, no encontramos paz y consuelo y encima volver a pasar por esos procesos” expresó.
López Morales fue asesinada y encontrada en un drenaje ubicado al final de la avenida Simeón Cañas, dos días después de haber desaparecido. Jorge Rafael Zea Mejía, esposo de Luz María, enfrenta un proceso penal por el delito de femicidio.
Casos en impunidad
La organización Mujeres Transformando el Mundo (MTM) resaltó que el año pasado, el Observatorio de las Mujeres documentó 531 femicidios, sin embargo advierte que factores como la pandemia han retrasado las investigaciones y agravado la mora judicial.
También indicó que durante 2021, fueron enviados a prisión preventiva 284 agresores de los 531 casos mencionados por lo que un 47 por ciento de los responsables continúa libre.