A Ukrainian serviceman rides atop a military vehicle past Independence square in central Kyiv on February 24, 2022. - Air raid sirens rang out in downtown Kyiv today as cities across Ukraine were hit with what Ukrainian officials said were Russian missile strikes and artillery. Russian President announced a military operation in Ukraine on February 24, 2022, with explosions heard soon after across the country and its foreign minister warning a "full-scale invasion" was underway. (Photo by Daniel LEAL / AFP)

Rusia tiene como objetivo imponer un «estatus neutro» en Ucrania.

El Kremlin afirmó el jueves que la operación militar lanzada contra Ucrania durará el tiempo que sea necesario, en función de sus «resultados» y de su «pertinencia», estimando que la mayoría de los rusos van a apoyar la ofensiva.

El portavoz de la presidencia rusa, Dmitri Peskov, indicó a los periodistas que el objetivo de Moscú es imponer un «estatus neutro» en Ucrania, una desmilitarización y la eliminación de los «nazis» que hay en el país.

«La duración (de la operación) estará determinada por sus resultados y por su pertinencia. Eso va a ser determinado por el comandante en jefe», indicó el vocero en referencia al presidente Vladimir Putin.

«Idealmente Ucrania necesita ser liberada y limpiada de nazis«, indicó a los reporteros, precisando que su país no intenta organizar una «ocupación».

Moscú acusa a las autoridades prooccidentales de Ucrania de organizar un «genocidio» de la población de habla rusa del este del país, con la ayuda de militares cercanos a la extrema derecha.

Peskov explicó que la decisión de atacar Ucrania fue motivada «por una preocupación» por el futuro de Rusia, que pidió durante semanas a los occidentales que vetaran un ingreso de este país a la OTAN.

El portavoz indicó además que el Kremlin había «previsto» que los mercados rusos iban a tener una «reacción emocional» a la ofensiva contra Ucrania.

«Para que este periodo emocional sea lo más pasajero posible, se tomaron todas las medidas necesarias«, afirmó en un momento de desplome de la bolsa rusa y del rublo, ante la incertidumbre y amenaza de duras sanciones contra Rusia.