El presidente y director del medio salvadoreño la Prensa Gráfica, José Roberto Dutriz, asumió ayer 20 de octubre como presidente de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) en el marco de la asamblea que se llevó a cabo en la ciudad de Córdoba, Argentina.

Durante la 80 Asamblea Anual de la SIP se abordaron temas relevantes para la región, como el deterioro democrático de las libertades de prensa y de expresión, la sostenibilidad de la industria de los medios y los retos que la inteligencia artificial y otras expresiones de las nuevas tecnologías plantean al periodismo.

La SIP es una organización que no tiene fines de lucro y que desde 1943 está dedicada a la defensa y promoción de la libertad de prensa y de expresión a lo largo y ancho del continente americano. La integran más de 1 mil 300 publicaciones y su sede se encuentra en Miami, Florida, Estados Unidos.

José Roberto Dutriz, quien fungía como vicepresidente de la SIP fue nombrado presidente de la organización y se convirtió en el primer salvadoreño en ocupar este cargo. En su nuevo rol, Dutriz conversó con Prensa Libre y abordó la situación de la libertad de expresión en América Latina, así como el panorama actual que enfrenta tanto la prensa como la sociedad en la región.

¿Cómo evalúa el trato que los gobiernos tienen con la prensa?

La libertad de prensa y libertad de expresión es responsabilidad de la SIP a nivel continental y podemos decir que está deteriorada por momentos, en el caso de América nos preocupan los casos extremos de la censura, el encarcelamiento de periodistas, de los atentados, como el del medio de comunicación El Debate en México.

También, la situación de los periodistas en Nicaragua, el clima de acoso que se vive en ese país y que ha derivado en el encarcelamiento de muchos periodistas, varios han sobrevivido, pero están en el exilio, en Nicaragua no se puede hacer periodismo independiente, también vemos en Costa Rica una crispación en la democracia con los discursos fuertes del presidente.

¿Cómo analiza el caso de Guatemala respecto a la libertad de prensa y de expresión?

Es preocupante y es poco probable que el ambiente en torno a la libertad de prensa cambie en el corto plazo, no hay reformas estructurales en el sistema de justicia y una mayor protección internacional para garantizar la libertad de prensa. En Guatemala el papel de organizaciones como la SIP será crucial para documentar abusos y defender los derechos de los periodistas.

¿Considera que hay acceso a las fuentes de información en Guatemala y países vecinos?

En Guatemala vemos una situación política difícil, al igual que el acceso a la información, como sucede en otros países, por ejemplo, en El Salvador el periodismo sufre el difícil acceso a las instituciones públicas, si nos vamos más al sur vemos que en Argentina el presidente habla fuerte contra el periodismo, y se clausuró el instituto de acceso de la información pública. Los funcionarios escogen los medios de comunicación donde les gusta exponerse y no se les cuestiona, esto también sucede en el Salvador, donde hay una orden del presidente Nayib Bukele para que los funcionarios no atienden a la prensa y clausuró el instituto de acceso a la información.

¿Cree que esa censura y favoritismo de los funcionarios también existe en Guatemala para protegerse?

Siempre lo medimos en cada país y Guatemala no es la excepción, está el caso emblemático del periodista Jose Rubén Zamora, a quien se le ha privado de un debido proceso y su libertad se ha demorado en un proceso penal, pensamos que en Guatemala la sociedad se está volviendo inmune a la situación que vive el periodismo, la sociedad se está acostumbrando a un sistema de acoso y a la falta de espacios para el periodismo.

En Guatemala hace falta mucho saber escucharse, los diferentes sectores no se han sentado a escucharse, vemos al presidente Arévalo con dificultad para encontrar consensos con la sociedad, no tiene un momento del todo fácil y eso repercute en que en Guatemala, al no tener una libertad de expresión, no existe inversión extranjera; vemos que algunas inversiones extranjeras buscan otros países en Centroamérica.

¿La censura a la prensa en Guatemala se compara con la de otros países?

Un hermetismo como el de El Salvador o Argentina no hay aún, en Guatemala el gobierno tiene cierta disposición, en realidad el panorama de ustedes deben saberlo mejor que yo, pero sabemos que muchos medios están tomando una posición o un compás de espera o de mejor acomodarse a una especie de autocensura.

¿Qué puede hacer la SIP para evitar el acoso a la prensa y a la libertad de expresión en Guatemala?

Estamos esperando la respuesta del presidente Arévalo, en una reunión privada que se tuvo con él cuando llegamos en febrero pasado y él ofreció adherirse a la Declaración de Chapultepec que es la carta magna de la SIP y que tiene que ver con defender la libertad de expresión, en ese sentido, él manifestó que quiere suscribir la declaración.

Sin embargo, en esa oportunidad en el Palacio Nacional dijo que se tomaría un tiempo para analizarlo, que estaba de acuerdo, pero que se tomaría un tiempo para respondernos, estamos esperando que se haga un nuevo acercamiento para volverle a plantear, cuándo piensa suscribirse y volver a tener un análisis con diferentes sectores.

¿Qué alcances tendría dicha adhesión para defender la libertad de expresión?

Bueno, la han suscrito varios presidentes de Guatemala en el pasado, con esta declaración el gobernante se compromete a que habrá una libertad de prensa, lo mismo ha sucedido con funcionarios de organismos judiciales, de asambleas legislativas a lo largo del continente, tenemos suscripciones de muchos jefes de Estado, es una declaración que se firmó en 1994 en Chapultepec, México. La población tiene derecho a estar informada, si los presidentes se suscriben a esta declaración podemos decir que estamos en terreno fértil para que una sociedad pueda desarrollarse.

¿Cuál es el llamado que haría a los presidentes de América?

Queremos decirles que se sienten con la prensa para dialogar, que no haya más acosos, persecuciones, encarcelamientos y que pueda tratarse el tema de la desinformación.

La desinformación le hace tanto daño a la sociedad, porque es manipulada y muchos gobernantes recaen en esa práctica, principalmente los que tienen características de autoritarismo y ocupan ciertos medios de comunicación para atacar a los medios independientes, es un tema que se va a tratar en diferentes misiones que tendrá la SIP. La desinformación es una de las cosas que los gobiernos implementan como una guerra injusta contra la prensa independiente y es una defraudación a la sociedad.