El establecimiento fue afectado por la pandemia que obligó a los propietarios a reducir su personal y adaptar los espacios para cumplir con las normas sanitarias.
En agosto de 2020 José Manuel del Busto, uno de los representantes de la familia que dirige el Hotel Modelo, el más longevo de Xela y el occidente, aseveró que intentarían seguir adelante pese al golpe debido a las restricciones por la pandemia de COVID-19.
Este hotel, que está en la 14 avenida “A”, zona 1, del Centro Histórico de Xela, funcionó durante 129 años – fue fundado en noviembre de 1892 -, optó por reabrir sus puertas con las nuevas normas sanitarias.
Desde el 20 de marzo de 2020 habían cerrado, y en los meses siguientes intentaron prepararse para abrir de nuevo, según contó Del Busto.
Adaptaron las instalaciones. Pusieron espacios con el distanciamiento social requerido, un ingreso exclusivo para trabajadores y muchas otras cosas que esperaron que ayudaran a que las personas se sintieran seguras.
“La pandemia golpeó en el final de la temporada baja y el inicio de la alta, de la cual tenían altas expectativas al igual que en 2019”, contó en su oportunidad.
Esta empresa familiar tuvo que reducir su planilla y acogerse al apoyo gubernamental, pero ni aún así lograron mantenerse a flote.
Finalmente el momento que temían llegó. Cerrar ante las circunstancias económicas actuales.
Así lo hicieron saber en sus redes sociales por medio de un comunicado oficial.
«Con el corazón lleno de emociones queremos compartir una decisión muy dura que después de mucho análisis debimos tomar», relatan en el comunicado los propietarios del Hotel Modelo de Xela.
«Hoy estamos cerrando las puertas del Hotel Modelo en Quetzaltenango. Las pruebas enfrentadas nos hicieron reflexionar sobre el futuro de la empresa y la posibilidad de recuperar su rentabilidad en un destino turístico que fue severamente golpeado por la pandemia», agregan.
En el informe que publicaron en sus redes agradecieron y mostraron su gratitud «hacia los miembros de la familia de colaboradores de Hotel Modelo que se entregaron en cuerpo y corazón para atender las necesidades de nuestros clientes, que demostraron cada día su compromiso por hacerlos sentir en su hogar, lejos de su hogar, y que fueron la esencia de la calidez característica de nuestros servicios».
Además, a todos los clientes que confiaron en sus servicios, les dijeron: «No podemos más que agradecer la confianza que nos brindaron durante tantos años, las historias compartidas y las amistades logradas, las risas y lágrimas…. los extrañaremos muchísimo».
«Agradecemos también la confianza y solidaridad de nuestros proveedores, la calidad y honestidad de sus productos y servicios fueron un pilar en nuestra operación», apuntaron.
«Quedamos en deuda con nuestra amada Xelajú por permitirnos durante 129 años desarrollar nuestra empresa y entretejernos en la comunidad, por habernos dado tantas oportunidades y ser nuestra motivación».