Decomisos recientes demuestran que el país aún es una ruta en disputa para el traslado de droga, principalmente para los cárteles Jalisco Nueva Generación y Sinaloa.
El reciente enfrentamiento entre cárteles de la droga ocurrido en Chiapas, México, obliga a las autoridades del ejercito y policiales mantener los cordones de seguridad, para evitar que grupos criminales que pelean por tener la ruta de la droga provoquen hechos de violencia en territorio nacional.
Por el momento, el Ejército de Guatemala mantiene el despliegue de 2 mil soldados en áreas vulnerables de la frontera. De igual forma, un contingente policial de por lo menos mil agentes permanece en el área.
El director de la Policía Nacional Civil (PNC), David Custodio Boteo, refiere que el despliegue policial se mantiene en la franja fronteriza, principalmente en departamentos como Huehuetenango,Quiché y Petén, que tienen mayor extensión territorial y por donde pueden ingresar grupos armados para ganar territorio.
Los agentes antinarcóticos refieren que los recientes hechos ocurridos en el municipio de La Concordia, Chiapas, México, donde hasta ahora se ha confirmado la muerte de cuatro guatemaltecos que pertenecían a un grupo armado, revelan que los cárteles de la droga, principalmente los de Jalisco Nueva Generación (JNG) y Sinaloa, se disputan la ruta de la droga que proviene de América del Sur y pasa por Guatemala.
En Guatemala según las pesquisas de los especialistas, también se reclutan a personas con conocimientos militares, especialmente kaibilies y exkaibiles.
Guatemala, según las autoridades antinarcóticas, es utilizada como un puente para que la droga llegue a EE. UU. Ejemplo de ello es que el 28 de junio en la portuaria Santo Tomás de Castilla se incautaron 2.1 toneladas de cocaína en un contenedor.
Los agentes antinarcóticos indicaron que el alijo provenía de Colombia y tenía como destino México, aunque se desconoce si el envío era para el cártel de Sinaloa o JNG, los dos grupos criminales más grandes que en este momento tienen el control del trasiego de drogas en el vecino país.
Crece narcomenudeo
Aunque los decomisos de cocaína son fuertes, Boteo dice que la demanda de esta droga ha disminuido en Estados Unidos y empieza a ser remplazada por el fentanilo, lo que provoca que una parte de esa cocaína se quede en territorio nacional para la venta al menudeo, bajo el control de las pandillas.
“La baja demanda de cocaína en Estados Unidos provoca que la droga se quede en México y Centroamérica, y toda esa droga que se queda rezagada se vende por medio del narcomenudeo”, indicó Boteo.
“Hay demasiada cocaína rezagada en el mercado y los grupos de narcotráfico están buscando cómo venderla, porque en Estados Unidos el fentanilo se consigue más barato y en cualquier lugar, y por lo tanto ha disminuido considerablemente el consumo de esa droga”, puntualiza.
Agrega que en Guatemala, la venta de droga al menudeo ha provocado disputas entre las clicas del Barrio 18, que opera en la zona 6, y la Mara Salvatrucha (MS13), que opera en las zonas 13, 9 y 7 de la capital.
La llegada
La ola de violencia en Chiapas, entre la frontera México- Guatemala recrudeció desde septiembre del 2023, cuando una caravana de sujetos armados del cártel de Sinaloa llegó a la línea fronteriza y fue recibida con aplausos y gritos de apoyo de los propios pobladores.
A partir de ese momento, los hechos criminales en esa región han sido más evidentes, a tal punto que se registraron en Ayutla, Tecún Umán, Ocós, La Blanca y Malacatán, todos municipios de San Marcos, donde durante años investigaciones conjuntas entre el Gobierno de Guatemala y Estados Unidos han detectado la presencia de clanes que trafican con droga vía marítima y terrestre.
Los investigadores antinarcóticos reconocen que en años anteriores los grupos de narcotraficantes han traspasado las fronteras guatemaltecas, principalmente para supervisar la siembra de amapola, el contrabando de mercadería y las migraciones ilegales, esto con el aval de autoridades municipales.
Nuevas rutas
Aunque este año las autoridades reportan fuertes decomisos de cocaína, también reconocen que es un problema difícil de erradicar debido a que las estructuras criminales buscan nuevas rutas y estrategias para trasladar cualquier tipo de droga.
Según las cifras del Ministerio de la Defensa (Mindef), este año a raíz de que se reforzó la cantidad de elementos castrenses en Petén y otras regiones para impedir el aterrizaje de narcoaviones, los narcotraficantes han optado por rutas marítimas y tratan de utilizar los puertos para entregar las mercancías.
En tanto que la PNC refiere que los alimentos y productos de uso diario son el blanco para ocultar la droga que se intenta pasar por Guatemala.
Este año, de acuerdo con la información del Mindef, la mayoría de decomisos se han hecho frente a las costas guatemaltecas y en contenedores del puerto Quetzal, Escuintla.
La institución informó que después de que se reforzó la seguridad en Petén, identificaron que los cargamentos que provienen de América del Sur son trasladados por la vía aérea para aterrizar en Belice o en México.
Además, que desde Colombia, Ecuador y Perú, la cocaína es disuelta en la ropa, y al llegar a su destino la vuelven sólida mediante químicos. También le abren agujeros a los aguacates y las piñas para esconderla.
Los agentes antinarcóticos afirman haber encontrado polvos o químicos que son nocivos para las unidades caninas que los apoyan en los operativos de rastreo, ya que la intención de los narcotraficantes es que la droga no sea localizada, pero también provocar la muerte de los canes, aunque hasta el momento no lo han logrado.