El Gobierno de Guatemala cedió ante las presiones de organizaciones indígenas que exigen derogar un acuerdo que busca regularizar al comercio informal.
Luego de dos días de bloqueos en Guatemala, el Gobierno por medio de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) derogó el acuerdo 12-2023 que entró en vigencia en enero y obliga a los comerciantes a emitir factura con nombre de una persona jurídica o natural en las compras mayores a Q2 mil 500, informaron fuentes tributarias.
Como una medida de presión para las autoridades, decenas de campesinos integrantes de la organización 48 Cantones de Totonicapán, bloquearon desde el lunes cinco carreteras importantes del país, principalmente en el occidente, en rechazo a las nuevas reformas que buscan regularizar el comercio informal.
“Las modificaciones tributarias anunciadas por la SAT afectan al comercio informal y a los pequeños comerciantes”, afirmaron en un comunicado los representantes de los de las comunidades indígenas de los 48 Cantones de Totonicapán.
La organización indígena bloqueó cinco puntos en la carretera Interamericana en Quiché, Totonicapán, Quetzaltenango y Sololá, medidas que serán depuestas luego de que la SAT accediera a analizar las reformas.
De esa cuenta, una fuente de la SAT confirmó que el acuerdo 12-2023 fue derogado de manera temporal, pero mediante el compromiso de la integración de mesas de diálogo para que en 60 días se haga una nueva propuesta de esa ley.
Se dijo que durante los dos meses de prórroga se harán los análisis correspondientes para incluir en el nuevo acuerdo parte de las demandas que hace los líderes campesinos, principalmente todas las relacionadas con la economía familiar.
Con esa medida, el Gobierno espera que los campesinos desistan de las protestas, pues estas afectan a miles de guatemaltecos y al comercio internacional, pues esa una ruta que conecta con México.
Líderes de los 48 Cantones hicieron un llamado a los pobladores que están en los bloqueos para que, en forma ordenada, empiecen a desalojar las áreas tomadas.
El acuerdo entre autoridades y líderes indígenas se logró mediante una mesa de diálogo en la que participaron autoridades de la SAT, Ministerio de Economía y Procuraduría de los Derechos Humanos.