La semana pasada el presidente, Alejandro Giammattei, junto con la ministra de Salud, Amelia Flores, anunciaron la renegociación del contrato de vacunas Sputnik V con el Fondo Ruso de Inversión Directa (RDIF). El aparente acuerdo fue asegurar un calendario de entregas mensuales por la cantidad de inmunizaciones ya pagadas (8 millones de dosis) por Q614.5 millones.
El acuerdo original establecía la compra de 16 millones de dosis por un total de Q1.2 millardos, para los cuales se adelantó el 50 por ciento del pago. Ante los atrasos (solo se han recibido 960 mil dosis) desde que se firmó en abril el contrato, el gobierno anunció la semana pasada una supuesta renegociación que consistía en solo obtener los 8 millones de inoculaciones ya pagadas.
Pero el contenido del nuevo contrato, así como el firmado en abril pasado, aún son un secreto. En citación con diputados de la Comisión de Previsión de Seguridad Social los funcionarios de la Secretaría General de la Presidencia (SGP), Procuraduría General de la Nación (PGN) y Contraloría General de Cuentas (CGC) confirmaron que ni Giammattei ni Flores solicitaron asesoría para la firma del nuevo documento.
Los viceministros de Salud, Leslie Samayoa y Edwin Montúfar, también coincidieron en que no conocían las cláusulas y que incluso la Ministra no les comentó nada sobre ello. “¿Entonces a qué se refieren con eso de la renegociación de la compra?” preguntó el presidente de la sala de Trabajo, Orlando Blanco.
Carlos Palma, director de Atención de Denuncias de la CGC, indicó que luego del anuncio de Giammattei se emitió un nuevo nombramiento para conocer en qué consistió la renegociación. Agregó que la Ministra ya fue notificada y que se requirieron todos los documentos legales, administrativos, financieros, así como la papelería de soporte para que sean analizados.
Según explicó Palma, inicialmente se pidió información a los ministerios de Finanzas y Cancillería sobre el “famoso contrato”, pero ambas carteras no lo entregaron. Los congresistas cuestionaron la postura de la Ministra en respaldarse en el Artículo 1 de la Ley para el Financiamiento y Adquisición de Vacunas.
Sin cancelar el contrato
El Gobierno firmó en abril pasado un contrato de compra de 16 millones de dosis de vacunas Sputnik V por Q1.2 millardos
De esa cantidad se pagó el 50 por ciento, es decir Q614.5 millones, que equivalen a 8 millones de dosis.
Pero hasta ahora se han recibido 960 mil inoculaciones (de las cuales solo 60 mil son segundas dosis).
Con la supuesta renegociación, al tomar los Q614.5 como el total de la compra, el gobierno no solo pagó por adelantado 8 millones de dosis, sino también flexibilizó las fechas de entrega.