En un proceso de revisión de las identidades de más de 100 cuerpos se constató que las autoridades mexicanas entregaron los restos de otra persona a los parientes guatemaltecos.
Hace 14 años que ocurrió la Masacre de San Fernando, Tamaulipas, México, en la que perdió la vida Yovanny, junto a otros 71 migrantes. Yovanny era guatemalteco y tenía 17 años cuando desapareció. Después de más de una década, su familia no lo olvida.
Se realizaron los procedimientos y la familia de Yovanny fue notificada del hallazgo del cadáver de su hijo. Fue repatriado, pero fue cremado sin que la familia lo supiera con antelación. Fue honrado y enterrado.
Sin embargo, en 2019 la familia fue notificada de un error. Las cenizas que les fueron entregadas no pertenecen a su hijo. El cuerpo de Yovanny aún se encuentra en México.
“El cuerpo de Yovanny no está cremado; afortunadamente, no, y por eso es que se logró hacer los dictámenes en el 2019, cuando a la familia se le se les notificó del error. Se aprovechó para solicitarles sus perfiles, los cotejaron con el cuerpo que está allá —en México— y efectivamente se confirma la identificación de los perfiles de los familiares con el cuerpo de Yovanny”, explicó la abogada de la familia, Rosmery Yax.
La defensa es quien relata la historia, porque la familia decidió que no harían públicos sus nombres ni sus apellidos, por protección.
Yovanny era originario de Quiché y fue ejecutado por el cartel de Los Zetas. Un reporte de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos de México relata que los migrantes fueron secuestrados por la organización, encerrados y obligados a trabajar para el grupo. Estos se negaron y fueron asesinados, para luego ser abandonados a la intemperie a 150 kilómetros de la frontera con Estados Unidos.
El cuerpo fue encontrado por el ejército mexicano en una de las 48 fosas que contenían 196 cadáveres de distintos hechos. El hallazgo se dio en San Fernando, Tamaulipas. Al menos 24 de esos pertenecen a guatemaltecos.
Nuevo proceso
Yax señaló que la familia no pide ningún resarcimiento, la única solicitud que se ha hecho desde que se confirmó la identidad ha sido una repatriación y proceso simultáneo. Este consiste en repatriar el cuerpo, exhumar los restos y sepultar a Yovanny.
La petición se realizó de esa manera, porque, de acuerdo con la defensa de la familia, no tienen recursos para otro puesto en el panteón. El que poseen es en el que están sepultadas las cenizas.
“La familia ha puesto esto como condición y están en toda la razón por el grave error, por lo menos para que se cumplan ciertas garantías y que sea un proceso simultáneo”, sostuvo Yax.
Por otro lado, cuando la familia recibió a Yovanny no se les permitió ver el cuerpo ni se les entregó documetación que constataran la identidad de Yovanny. Además Yax también describe que que cuando recibieron el cuerpo estaba cremado, extremo que no les había sido informado con anterioridad.
Las identidades fueron revisadas por una Comisión Forense integrada por equipos de profesionales argentinos y peritos de la Fiscalía General de la República (FGR) en agosto del 2013.
El comité nació para darle seguimeinto a la identificación de víctimas de la Masacre de San Fernando, la Masacre de Cadereyta, entre otras sumando 131 cuerpos en total de los 196 que fueron encontrados.
La Comisión Forense detectó que el perfil de de Yovanny no coincidía con los restos que le fueron entregados a la familia, pero si lo hacían con los de uno de los cuerpos que les fueron entregados y que estaban en la Ciudad de México.
Tanto la abogada Yax como la Fundación parala Justicia, que es parte de los actores que firmaron un convenio con la Comisión, aseguran que en 2015 fue notificada la situación a los involucrados en el acuerdo y a las autridades guatemaltecas. Fue hasta cuatro años después que la familia fue informada por el Consulado de México en Quetzaltenango.
Sin avances
Yax afirma que hay un retraso en los procesos. comenta que se solicitó al Ministerio Público (MP), quien debe de pedir ante un juez la autorización para exhumar el cuerpo. Además, que la Cancillería debe de realizar los procedimientos necesarios y comunicaciones para el proceso simultáneo.
«Hacer el llamado a la cancillería y a todas las instancias correspondientes a atender estos casos, y aparte de eso, pues a establecer procedimientos que garanticen la identificación de restos y que no únicamente acepten lo que México remite», sugirió Yax.
Se consultó a la Cancillería guatemalteca sobre el caso y avances en el proceso, pero luego de varios días no se obtuvo ninguna respuesta al respecto.
Yax puntualizó que en abril se realizó la solicitud al MP, luego que en 2023, segun la Fundación para la Justicia, los peritos de la Comisión dieran los dictámenes correspondientes de la corrección de la identidad.
La Fundación también señala que el proceso por el que fue identificado el cuerpo se realizó basado en perfiles de la familia, además de pruebas genéticas, entrevistas y otros datos ante-mortem.
«Es una muestra clara de los graves errores que ha cometido México, pero es una muestra también que Guatemala no tiene voluntad para poder reclamar o salvaguardar los derechos de los connacionales», concluyó Yax.