Hasta este lunes 1 de abril la Policía Nacional Civil (PNC) no podía confirmar que los atacantes de la fiscal del Ministerio Público eran impostores. El problema radica en que existe una venta ilegal de uniformes de la Policía y cualquier persona en el lugar correcto con el dinero indicado puede comprar desde el pantalón hasta las insignias policiales, incluso con los controles de seguridad impuestos por el Ministerio de Gobernación para evitar las falsificaciones.
Las insignias de la PNC se ofrecen a plena luz del día en comercios de la zona 1 de la capital, frente a la propia Dirección General de la Policía a Q35 y los chalecos para portar armas y tolvas se pueden adquirir a Q150. . También hay batones, chumpas y gorras con el logo de las unidades policiales incluido.
Los negocios siempre tienen clientes; mientras unos agentes preguntan por los precios de los artículos, otros se toman medidas para un nuevo uniforme, pues, según ellos, la tela que ofrecen en estos comercios es de mejor calidad que la que proporciona la institución, y no se «rompe tan fácilmente».
Agentes que prefirieron mantener el anonimato, indican que pedir un nuevo uniforme en la administración de la PNC significa un «largo protocolo” y finalmente no lo reciben. Es más fácil, según ellos, que le den un uniforme nuevo a un agente operativo que a uno administrativo, aunque el deterioro de la ropa sea evidente.
“El año pasado dieron dos uniformes, pero muchos ya ni los tienen, la mala calidad de la tela hace que se arruinen bien rápido y nadie quiere andar así. En la venta de afuera me cuesta Q400 un uniforme azul y los que nos dieron el año pasado están valorados en Q1 mil 200”, confía un agente a Prensa Libre.
Difícil confirmar
El miércoles 27 de marzo, la fiscal del MP, Miriam Reguero Sosa, salió ilesa de un atentado en su contra, el segundo en menos de dos años. En el ataque murieron la madre de la investigadora y un miembro de su seguridad.
Los agresores, según las imágenes de cámaras de seguridad que circularon en redes sociales, vestían uniformes similares a los de la PNC y se movilizaban en una motocicleta similar a las que se usan en la institución, por lo que hay una línea de investigación para descartar o confirmar si los sicarios eran agentes, indicaron investigadores.
Agregaron que por las investigaciones no pueden dar detalles. Sin embargo, refieren que es difícil confirmar información cuando el uniforme de la PNC se puede adquirir “sin ningún control y en cualquier venta”.
“En esos negocios para comprar un chaleco, una insignia o pedir un uniforme, no te piden ningún documento para verificar si sos policía, creo que es algo que se debería regular”, señaló.
El vocero de la PNC, Edwin Monroy, indica que con los nuevos uniformes adquiridos en 2023 se tiene un mejor control sobre los agentes, puesto que estos incluyen un código QR en la parte superior de la manga izquierda, en donde «cualquier ciudadano» puede verificar el nombre del agente, fotografía, tipo de sangre y si se encuentra activo. Sin embargo, agentes consultados, aseguran que en los negocios donde se elaboran los uniformes se incluye el logo QR, aunque no tiene activada la aplicación.
Gasto millonario
Desde el 2009 el Estado ha pagado Q309 millones a la empresa Tactical Group, Sociedad Anónima, que ha elaborado los uniformes a la PNC.
En 2023 el Ministerio de Gobernación (Mingob) pagó Q39 millones para la elaboración de 80 mil uniformes, mientras que el ministerio de la Defensa les adjudicó Q24 millones por cuatro vehículos tácticos para el ejército.
En junio de 2021 el Mingob también gastó Q37 millones por la adquisición de 151 mil uniformes color negro tipo comando para uso del personal policial.