El director del Sistema Penitenciario Luis Rodolfo Escobar Ovalle, se ha caracterizado por mantener un grupo de extorsionadores en todas las cárceles del país. El motín registrado este miércoles 19 de mayo en la cárcel de Cantel en Quetzaltenango fue la gota que derramó el vaso de la paciencia de un preso víctima de las extorsiones del director. Los narcotraficantes extraditables recién capturados Estuardo Siguenza y Edwin Guerra estaban extorsionando a Carlos Roberto León, nieto del narcotraficante Juancho León acribillado por sicarios de Los Zetas en Zacapa el 25 de marzo de 2008.Carlos Roberto no cedió a los chantajes de los emisarios del director de presidios que solicitaban grandes cantidades de dinero. Luego de la visita general de los familiares, este miércoles, se retiró la venezolana esposa de Carlos Roberto y a la altura de la rotonda de tribunales de Quetzaltenango, varios sujetos armados dispararon en contra de la fémina que murió en el acto. A eso de las 16:00 horas, al conocerse la noticia de la muerte de la mujer, se dió la orden de ejecutar a los dos narcotraficantes y varios de sus escoltas a quienes mutilaron, hasta el momento se cuenta siete cadáveres, pero la cifra supera los 14 muertos.