El gobierno de Bernardo Arévalo y de Karin Herrera está por cerrar el cuatrimestre en medio de una escalada de conflictos.
La última de las crisis provino de la cúpula, por el incumplimiento de un compromiso de campaña, ya que la vicepresidenta no se rebajó el salario, como había ofrecido. La situación desató cuestionamientos en torno al grupo de técnicos y profesionales que asesora al binomio y las estrategias que proponen.
El costo de los contratos 0-29 para gestionar los asuntos más cercanos a la Presidencia y la Vicepresidencia y la efectividad de su trabajo es un punto de análisis para los expertos.
Las secretarías de apoyo más cercano para la Presidencia —General, Privada y de Comunicación Social— cuentan con un cuerpo de 87 asesores técnicos y profesionales contratados en el renglón 029, por Q1.1 millones mensuales, en total, de acuerdo con los reportes de información pública.
La Vicepresidencia tiene un equipo de 25 asesores, con funciones en las secretarías General, Privada, de Comunicación Social, Particular y en el Despacho, por un total mensual de Q395 mil 392.28.
Las crisis por la implementación del reglamento para la clasificación de desechos, el seguro vehicular obligatorio, así como las demandas de aumento salarial de los salubristas y el magisterio llegaron al punto máximo cuando se reveló que la vicepresidenta, Karin Herrera, no cumplió con rebajarse el salario en un 25%, como hizo el presidente Arévalo.
Herrera reaccionó con un comunicado, publicaciones en la red social X y la justificación de que el Ministerio de Finanzas no había atendido su solicitud para efectuar la rebaja.
Una de las conclusiones de los analistas es que lo ocurrido refleja falta de coordinación interna y debilidad institucional.
La imagen de la vicepresidenta se ha debilitado
José Carlos Ortega, director del Instituto de Servicios a la Nación, afirmó que el tema de los sueldos deja una imagen debilitada del binomio presidencial y, más aún, al conocerse las erogaciones por asesores. Además, cuestionó la forma como Herrera abordó la polémica: “El comunicado que emitió es pésimo. Las declaraciones que dio sobre su relación con el presidente son pésimas […]. Tiene mucho desconocimiento, una muy mala asesoría”.
Según Ortega, la imagen institucional se ve más afectada cuando la vicepresidenta traslada la responsabilidad a sus asesores.
Desglose del gasto en asesores de la Vicepresidencia:
- Secretaría General: 6 asesores — Q103,000.00
- Secretaría Privada: 6 asesores — Q100,964.28
- Despacho: 5 asesores — Q88,000.00
- Comunicación Social: 6 asesores — Q80,000.00
- Secretaría Particular: 2 asesores — Q23,428.00
Gasto e idoneidad cuestionable de los asesores
Respecto del gasto en esas asesorías, el analista en comunicación política Alejandro Quinteros opina que la situación expone un problema estructural en el uso de fondos públicos. “En cualquier institución, lo más importante es que las personas que estén contratadas sean las necesarias; ni más ni menos, y que sean las idóneas”, afirmó.
A su juicio, sería necesario “hacer una revisión más profunda de los perfiles y descripciones de puesto de las plazas que ella tiene a su cargo”, y evaluar si están ahí por mérito o por vínculos de nepotismo, políticos, porque apoyaron en la campaña o son del partido.
“Ha sido recurrente en varios gobiernos que se designe a personas allegadas, más que a las personas adecuadas”, añadió. Según explicó, este contexto hace necesario entender si los perfiles y quienes los ocupan son los idóneos, y ver los resultados alcanzados.