Un estadounidense fue ejecutado este jueves en Texas, más de treinta años después de un cuádruple asesinato vinculado al narcotráfico, y que él negó haber cometido.

Arthur Brown Jr, de 52 años, recibió una inyección letal en una prisión estatal de la ciudad de Huntsville, en el sur de Estados Unidos, informaron las autoridades locales.

Brown se convirtió en el quinto condenado a muerte en ser ejecutado en el estado conservador de Texas y el noveno en todo el país desde principios de año.