Xiomara Castro aseguró que la crisis en el Congreso no le impedirá asumir la Presidencia de la República.
La Embajada de Estados Unidos en Honduras hizo ayer, por medio de su cuenta en Twitter, un llamado a los políticos del país para que entablen un diálogo y se abstengan de provocar la violencia.
El mensaje lo divulgó un día después de que el Partido Libertad y Refundación (Libre), que lidera la presidenta electa Xiomara Castro, expulsara a 18 de sus diputados por oponerse a que el presidente del Legislativo fuera Luis Redondo.
“Estados Unidos hace un llamado a los actores políticos a mantener calma e instar a sus seguidores a expresarse pacíficamente, respetando el Estado de derecho”, escribió.
El sector privado de Honduras también pidió a los políticos dialogar para resolver sus diferencias y colocar al país como “objetivo primordial”. En un comunicado, el Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep) señaló que el zafarrancho registrado en el Congreso durante la elección de la Junta Directiva Provisional es “un mal mensaje a la población y a la comunidad internacional”.
“Expulsión definitiva”
La “expulsión definitiva” de los 18 diputados disidentes fue informada por Castro en una reunión extraordinaria de líderes y diputados de Libre, cuyo coordinador es el expresidente hondureño Manuel Zelaya.
El Congreso de Honduras instaló el viernes, con peleas y golpes, una presidencia provisional que terminó en manos de la oposición a Castro.
La Presidenta Electa ganó los comicios con la propuesta de impulsar transformaciones sociales que rescaten al país de la pobreza, la corrupción y el narcotráfico que infiltró las estructuras del Estado, lo que ha sido bien visto por Estados Unidos al favorecer su política antimigratoria.
Castro ofreció a la comunidad internacional “la seguridad de que los acontecimientos que ahora amenazan con desatar una crisis innecesaria en el Congreso Nacional, no van a detener la realización de la fiesta democrática del pueblo el próximo 27 de enero”, cuando ella jure en cargo. Por aparte, las Fuerzas Armadas de Honduras y la Policía Nacional garantizaron la toma de posesión.
En vigilia
Al cierre de esta edición, Castro lideraba una vigilia en las afueras del Congreso a donde llegaron simpatizantes del partido Libre con el objetivo de “evitar el secuestro” del Legislativo. “El pueblo no está para traiciones”, sentenció. La presidenta electa agregó que “los traidores” quieren entregar el Legislativo al presidente saliente Juan Orlando Hernández, quien ha sido señalado de narcotráfico. La vigilia fue convocada previo a la sesión del Congreso en que se elegirá a la nueva Junta Directiva. -Redacción