Guatemala figura entre los países más susceptibles al cambio climático debido a su ubicación, geografía y clima. El monto estimado de pérdidas es millonario.
Este 24 de octubre, se conmemora el Día Internacional contra el Cambio Climático, y en este contexto Prensa Libre investigó la relación entre la economía y los desafíos medioambientales, que ha despertado un interés creciente debido a su potencial impacto en la estabilidad económica.
Astrid Beltetón, investigadora del Instituto de Investigación en Ciencias Socio Humanistas del Departamento de Ciencias Económicas de la Universidad Francisco Marroquín, que trabajan interdisciplinarmente con el Instituto de Agricultura, Recursos Naturales y Ambiente (IARNA) de la misma casa de estudios, comentó que el grado de impacto económico derivado del cambio climático puede variar en función de diversos factores y características propias de la estructura productiva de cada nación.
En el caso de Guatemala, que se encuentra entre los países más susceptibles al cambio climático debido a su ubicación, geografía y clima. Estos elementos desempeñan un rol crucial en actividades económicas fundamentales del país, como la agricultura, el abastecimiento de agua, la generación de energía hidroeléctrica, entre otras.
Pérdidas entre 3.3% y 4.3% del PIB anual
La entrevistada, trajo a colación el modelo de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), que presenta una perspectiva preocupante acerca del impacto económico del cambio climático en Guatemala.
De acuerdo con este modelo, el costo acumulado del impacto medible del cambio climático en el país podría oscilar entre el 3.3 % y el 4.3 % del Producto Interno Bruto (PIB).
Es decir que, tomando como referencia la cifra del PIB anual de 2022, publicado por el Banco de Guatemala, que ascendió a Q736 mil 109 millones, la pérdida por las consecuencias del cambio climático en el país oscilan entre Q24 mil 291 millones 597 y Q31 mil 652 millones 687.
Además, estas cifras, en los escenarios moderado y elevado, podrían aumentar significativamente llegando al 37.7 % y al 63.6 % respectivamente para finales del siglo XXI, de acuerdo con la CEPAL, ya que estas estimaciones a largo plazo representan una suma acumulada de pérdidas a lo largo del tiempo.
En tanto, el índice de riesgo climático global de German Watch, en el período de 2000 a 2019, situó a Guatemala en el lugar 45 en términos de pérdidas económicas derivadas de eventos climáticos y en el lugar 48, en cuanto a pérdidas como porcentaje del PIB, resaltando así el impacto económico de esta problemática en el país.
Entre otras áreas afectadas por el impacto económico del cambio climático están:
- La migración
- La productividad agrícola
- El aumento en los precios de los bienes
- La intensificación de fenómenos meteorológicos extremos que contribuyen a la pobreza
- La propagación de enfermedades debido al incremento de las temperaturas
- El aumento de conflictos relacionados con la limitación de recursos
- La disminución de la capacidad de trabajar en condiciones de altas temperaturas
- Los costos asociados a la adaptación de zonas costeras ante el aumento del nivel del mar
Cantidad de lluvia podría disminuir, año con año
Mariano Cap, jefe del Departamento de Investigación y Servicios Meteorológicos del Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh) que forma parte el Sistema Guatemalteco de Ciencias del Cambio Climático (SGCCC), indicó que esta problemática es un proceso largo, en cuanto al análisis del registro histórico de la base de datos de las estaciones meteorológicas.
El entrevistado indicó que aún trabajan en la caracterización de los efectos locales y hasta el momento, han identificado los cambios en los patrones de lluvia, la afectación en el pronóstico del inicio y finalización de la época lluviosa, distribución de lluvia atípica, este último sumado a fenómenos como El Niño y el calentamiento de los océanos.
Con las condiciones actuales y proyecciones de aumento de temperatura globales han trabajado escenarios del cambio climático para Guatemala, los cuales han ido actualizando, y que permiten tener idea de cómo podrían cambiar ciertas variables en el tiempo. Analizando así, los posibles impactos del cambio climático en el país.
Como posible proyección han determinado que las cantidades de lluvia año con año podrían disminuir. Con esta información, se pueden empezar a analizar algunas medidas de prevención en el sector agrícola, seguridad alimentaria y en el sector energético, los cuáles puedan resultar impactados negativamente en el ámbito económico.
En tanto, Pablo Saravia, experto en temas ambientales, explicó que en los últimos años el cambio climático ha tenido mayor repercusión a nivel global.
Para Saravia, el día a día de las empresas, industrias y personas forman parte de las causas del calentamiento global. Por lo que propone cambiar la mentalidad del qué hacer y cómo hacerlo, y pasar de la sustentabilidad a la sostenibilidad, que busca un equilibrio entre lo social, ambiental y económico.
“También es importante la vinculación a la Agenda 2030 para mejorar las condiciones, y mantener las actuales para que las generaciones futuras tengan menos impacto de esta problemática, así como mitigar y reducir los daños ambientales generados por las actividades diarias”, agregó.