El presidente estadounidense, Joe Biden, expresó este miércoles su decepción por la decisión de la OPEP+ de reducir su bombeo en 2 millones de barriles diarios y consideró que se trata de una medida “cortoplacista”.
“En un momento en que mantener el suministro global de energía es de suprema importancia, esta decisión tendrá el mayor impacto negativo en los países de bajos y medianos ingresos, que ya están sufriendo los elevados precios de la energía”, dijo a través de un comunicado de su asesor de Seguridad Nacional, Jake Sullivan, y su consejero económico, Brian Deese.
El recorte de la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus aliados (OPEP+) es el mayor de la oferta petrolera desde mayo de 2020 y hace que la Administración de Biden vaya a consultar al Congreso sobre medidas adicionales para reducir el control de la OPEP sobre los precios de la energía.