Al menos 46 personas murieron el pasado junio en un ataque del grupo rebelde Cooperativa para el Desarrollo del Congo (Codeco) contra un campo de desplazados en el noreste de la República Democrática del Congo (RDC), confirmó hoy Human Rights Watch (HRW).
“Atacar civiles en los campamentos donde se refugian de la violencia se ha convertido en la atroz marca de Codeco”, dijo a través de un comunicado difundido este lunes Thomas Fessy, investigador de HRW para la RDC.
La organización pro derechos humanos aumentó así el número proporcionado inicialmente por las autoridades congoleñas, que cifraron los muertos en 41 el pasado 12 de junio, al día siguiente de la noche del ataque.
Codeco atacó esa madrugada, hacia las 2.00 hora local (00.00 GMT) el campamento de Lala, en la provincia de Ituri, y mató a 23 niños, 13 mujeres y 10 hombres, además de herir a otras ocho personas.
Aunque los propios desplazados y los residentes de la localidad vecina de Lodinga alertaron por teléfono al Ejército congoleño y a los efectivos de la misión de paz de las Naciones Unidas en la RDC (Monusco), estos no intervinieron, denunció HRW.
“Estos campamentos deberían ser refugios seguros y no lugares de masacre”, subrayó Fessy, al reclamar que esas fuerzas “hagan cumplir su mandato de protección para garantizar que los desplazados estén seguros y a salvo”.