Ante denuncias, ataques y cuestionamientos, David Gaitán renunció a la decanatura de Derecho de la Universidad Da Vinci.
La postuladora aprobó anoche el perfil para los aspirantes a Fiscal General y Jefe del Ministerio Público, que desarrolla los requisitos, incompatibilidades, incapacidades e impedimentos para ocupar el cargo, de acuerdo con lo que establece la Constitución.
La Comisión adoptó muchos de los criterios del proceso de selección de 2018. A propuesta del decano de Derecho de la URL, Rolando Escobar Menaldo, se requerirá a los aspirantes una declaración jurada en la que expongan que no hayan representado o asesorado en forma habitual a personas vinculadas con el crimen organizado, narcotráfico, lavado de dinero, fraude, evasión impositiva, delitos financieros o contra la administración pública, adopciones irregulares, violaciones a los derechos humanos, corrupción o abuso de poder.
Esa declaración jurada, que no aplica para los postulantes del campo de la defensa pública, servirá para que los comisionados se formen un criterio sobre las cualidades éticas de los aspirantes y para valorar posibles situaciones de conflicto de interés si llegaran a ocupar el cargo.
El presidente del CANG, Fernando Chacón, argumentó que bajo el principio de presunción de inocencia no debería ser motivo de exclusión de un aspirante que se haya dedicado al litigio, pero su reflexión no tuvo eco y la propuesta se aprobó por mayoría.
En cuanto al perfil académico, se aprobó que se convocará a abogados y notarios, preferentemente con estudios de posgrado en materia constitucional, penal, administración pública o investigación criminal y forense. También es deseable que hayan ejercido la docencia como mínimo durante cinco años.
La propuesta inicial iba dirigida a los penalistas, pero por intervención de la presidenta de la postuladora, Silvia Valdés, se abrió a los constitucionalistas.
Con 14 integrantes
Con 14 integrantes, la postuladora siguió adelante pese a la ausencia del decano de la Universidad Da Vinci. Durante la jornada se conoció de la renuncia de Gaitán ante acciones legales e intimidatorias. También se cuestionó su nombramiento, ya que para ser decano se requería el título de magíster, según los estatutos de la universidad.