EsLos recortes a la economía global que brindó está el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM) asociado a la política arancelaria de Estados Unidos, el efecto que tendrá para las exportaciones guatemaltecas en el futuro cercano y una baja ejecución en los diferentes programas de inversión pública, pronostican un escenario conservador de la actividad económica para Guatemala.

Aunque el efecto es macro, también puede haber un efecto micro, por el lado del recorte de personal en aquellas actividades empresariales exportadoras que dependen de los negocios con Estados Unidos y que puedan verse afectadas o bien por el traslado de empresas hacia otros países que no tienen el cupo arancelario, se explicó durante un foro.cuchar nota

Y aunque el ingreso de remesas familiares, han registrado un crecimiento de doble digito en el primer trimestre del año, es incierto sobre el futuro cercano que puede impactar en el consumo interno, se expuso.

Complicada coyuntura

El diputado Julio Héctor Estrada Domínguez, presidente de la Comisión de Finanzas del Congreso de la República, declaró que todo depende del impacto que se tenga por la incertidumbre que se ha generado en las exportaciones de Guatemala hacia Estados Unidos, las decisiones que adopten las empresas en cuanto a sus inversiones, por el movimiento arancelario internacional por Estados Unidos.

Por otro lado, mencionó que también dependerá de cómo Guatemala puede aprovechar esa oportunidad, para poder solventar los problemas de competitividad interno, como los trámites, gestiones o licencias sanitarias, ambientales y los despachos en las aduanas y puertos para poder lograr una negociación de eliminar a Guatemala de la imposición del 10% del arancel.

“Si se llega aprovechar esa oportunidad, pueda haber la necesidad de promover acciones legislativas, se han citado a las autoridades para conocer el plan de trabajo y como se puede adaptar a lo que se pueda hacer en el Congreso”, apuntó.

Recordó que por los temores de los migrantes guatemaltecos, este año arrancó con una “avalancha” fuerte de remesas familiares, pero es seguro que habrá una contracción, la cual será el siguiente año y al debilitarse los envíos, el crecimiento económico para este año dependerá del consumo, y como se maneje ese riesgo por la administración del presidente Donald Trump.

Agregó que está el componente de la inversión pública y la ejecución presupuestaria del Gobierno Central, que al haber un presupuesto expansivo con un déficit fiscal del 3.5% con relación al producto interno bruto (PIB) que, al ejecutarse a escala local y nacional, representa entre 1% y 1.5% adicional por ser una demanda agrega, pero si no se ejecuta “se queda en reserva y no se suma en la economía”.